Plinio Colombi born in February 1873 in Ravecchia.
He died in September 1951 in Spiez.
He was a Swiss painter and graphic designer.
He was the son of Enrico Colombi and Hedwig Huber.
After his secondary studies in Lausanne, he began studying architecture at the Technikum Winterthur, but quickly moved towards artistic and craft training.
In 1897 he was in Paris. He then worked as a decorative painter in Bern and from 1899 he became an independent artist. In 1904, he married Marguerite Petter. He lived in various regions of the canton of Bern, from 1924 in Spiez, where he also died.
In 1939, the Kunsthalle Bern exhibited his works.
His models were Arnold Böcklin and Ferdinand Hodler.
He often chooses landscape motifs from the Lake Thun region but also still lifes, with a preference for thistles. His works include printmaking, painting, engraving, aquatint, lithography, woodcut, drawing and also posters.
This work of art depicts a majestic mountain scene, strikingly capturing the essence of nature in all its splendor. The imposing, majestic mountains dominate the center of the composition, their peaks bathed in a golden light that creates a striking contrast with the deep shadows of the valleys. The painter has skilfully used the play of light to accentuate the relief and contours of the mountains, bringing out their grandeur and robustness. The calm water in the foreground acts as a crystalline mirror, impeccably reflecting the verdant hues of the mountains and sky, adding extra depth and dimension to the composition. The smooth surface of the lake creates a sense of tranquility and peace, in contrast to the raw power of the mountains. The sky, dotted with a few fluffy clouds, adds a touch of dynamism to the whole. The colors used are strikingly realistic, with deep blues and lush greens, faithfully depicting the rugged beauty of this mountainous region. This painting stands out for its meticulous attention to detail and its mastery of light and shadow techniques to create a vibrant, lively scene. In short, this work is an impressive tribute to the natural majesty of the mountains and the serene tranquility of the waters that surround them. Original frameWork on canvas White wooden American box frame71 x 92 x 6 cm
Plinio Colombi nació en febrero de 1873 en Ravecchia.
Murió en septiembre de 1951 en Spiez.
Fue un pintor y diseñador gráfico suizo.
Era hijo de Enrico Colombi y Hedwig Huber.
Tras sus estudios secundarios en Lausana, comenzó a estudiar arquitectura en el Technikum Winterthur, pero pronto se orientó hacia la formación artística y artesanal.
En 1897 estaba en París. Después trabajó como pintor decorativo en Berna y a partir de 1899 se convirtió en artista independiente. En 1904 se casó con Marguerite Petter. Vivió en varias regiones del cantón de Berna, a partir de 1924 en Spiez, donde también falleció.
En 1939, la Kunsthalle de Berna expuso sus obras.
Sus modelos fueron Arnold Böcklin y Ferdinand Hodler.
A menudo elige motivos paisajísticos de la región del lago de Thun, pero también bodegones, con preferencia por los cardos. Sus obras incluyen grabado, pintura, grabado, aguatinta, litografía, xilografía, dibujo y también carteles.
Esta obra de arte representa una majestuosa escena montañosa, captando de forma impactante la esencia de la naturaleza en todo su esplendor. Las imponentes y majestuosas montañas dominan el centro de la composición, sus cumbres bañadas por una luz dorada que crea un llamativo contraste con las profundas sombras de los valles. El pintor ha utilizado hábilmente el juego de luces para acentuar el relieve y los contornos de las montañas, resaltando su grandeza y robustez. El agua en calma del primer plano actúa como un espejo cristalino, reflejando impecablemente los tonos verdes de las montañas y el cielo, añadiendo profundidad y dimensión a la composición. La suave superficie del lago crea una sensación de tranquilidad y paz, en contraste con la fuerza bruta de las montañas. El cielo, salpicado de algunas nubes esponjosas, añade un toque de dinamismo al conjunto. Los colores utilizados son sorprendentemente realistas, con azules profundos y verdes exuberantes, que representan fielmente la belleza agreste de esta región montañosa. Este cuadro destaca por su meticulosa atención al detalle y su dominio de las técnicas de luces y sombras para crear una escena vibrante y llena de vida. En resumen, esta obra es un impresionante homenaje a la majestuosidad natural de las montañas y a la serena tranquilidad de las aguas que las rodean. Marco originalObra sobre lienzo Marco de caja americana de madera blanca71 x 92 x 6 cm
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